martes, 26 de junio de 2012

~ Decid patata ~


 
   Hacer una foto parece tarea fácil, es así si no se tienen manías antes de estar totalmente preparado para que la hagan. Porque es así... hasta para esto hay gente que son un poco maníacos.

   En primer lugar, una foto es una imagen, y bueno vale que queramos estar estupendos y así nos guste al verla, pero hay algunos que exageran un tanto. Dan mil vueltas a su pelo, se colocan y recolan su ropa,y hasta se echan perfume!! hombre las tecnologías han avanzado pero no en ese aspecto.



   Pues muy bien, ya después de toda esa retahíla de cosas, se supone que están listos.. pues no!! porque ahora llega el momento en el que se piensan cuál es su perfil bueno...unos segundos más tarde supuestamente ya están listos. Se hace la foto, aunque en el caso de algunos/as no se hace una sino unas 15 en 2 min y resuelta que ninguna les gusta!! y vuelta a empezar de nuevo todo el proceso.


   Ahora es el momento que alguno diga “ no, yo no soy así” pues mentira! Porque no podemos negar que en algún momento nos hemos puesto especiales para hacer una simple foto. Poniendo la típica excusa “es que es importante y hay que salir bien” (ya sea para bodas, bautizos, fiestas, graduaciones..) vamos esas fotos que luego vemos y decimos que mal quedé, y que se vuelven a ver de vez en cuando para hacer memoria.

   Yo creo que si nos preocupamos menos de como vamos a quedar en una foto, salimos hasta más naturales y puede que nos guste más. Pero ahora les toca el turno de opinar a vosotros sobre este tema. Comentes abajo todo lo que piensan sobre esto!

4 comentarios:

  1. ¡Yo si soy así! Pero discrepo en lo de que si nos preocupáramos menos, saldríamos mejor ¡Porque yo nooo! Jijiji
    Besitos

    ResponderEliminar
  2. Pues a mí no me agrada demasiado posar para la cámara, pero si me pongo nervioso se me va a notar en la expresión facial, así que me pongo nervioso por si me puedo poner nervioso. Por eso creo que salimos mal. Hoy en día las cámaras digitales permiten que uno pueda posar tranquilamente en casa, y hacerse todas las tomas que quiera, y sin acudir a profesionales. Pero, claro, uno cae en la tentación de hacerse una nueva toma por si la anterior no estuvo bien del todo. Y así me pasó que para la última vez que renové el D.N.I. estuve posando tres días, y en varias sesiones, para la cámara, buscando siempre una toma donde me sintiera reconocido. Ahí me di cuenta de lo duro que debe ser lo de trabajar de modelo, jajaja. Y finalmente elegí una entre decenas. La cosa es que al poco tiempo me puse a adelgazar y perdí 10 kilos, con lo que ya dejé de parecerme al de la foto. Resulta que el año pasado me eligieron para ser jurado popular en el palacio de justicia, y cuando llegué tuve que entregar el D.N.I. a un policía que se me quedó mirando atentamente a ver su coincidía con el de la foto. Y yo sólo pude decirle: "Sí, ese soy yo... cuando estaba gordo", jajaja. Besos.

    ResponderEliminar
  3. Tienes toda la razón, todo el mundo lo ha hecho alguna vez. ¡Yo lo hago! Y antes odiaba las fotos, ahora no puedo parar de capturar imágenes. Me he reído mucho con el comentario de Roberto y he de confesar que es que yo cuando estaba más gordo, no quería ver una cámara ante mi ni en pintura les tenía una tirria enorme porque odiaba como salía. Ya sé que decir la próxima vez que me pidan el carnet y se queden un rato comparando: Sí soy yo...cuando tenía más pelo. Jajaja

    ResponderEliminar
  4. Acá en Perú, cuando tomamos fotitos le pedimos al que está posando, que haga una sonrisa KOLYNOS, como la del comercial o sino... que diga SHIIIIIIII y al toque le soltamos el flash, así podemos capturar una agradable sonrisa. Jijijiji. Interesantísima entrada Gobri.
    Besitos y abrazos desde Perú!

    ResponderEliminar